En Bodega del Abad siempre hemos tenido clara nuestra raíz. Somos Bierzo por los cuatro costados.
En esta añada hemos tenido la fortuna de ver ese esfuerzo acompañado de unas condiciones meteorológicas muy favorables para los viñedos. Así, durante el día hemos vivido en la zona de El Bierzo en la que se encuentran nuestras viñas días con altas temperaturas que se compensaban con noches frescas. Un desfase que ha favorecido a que la maduración de la uva sea la adecuada, con un equilibrio justo y, por tanto, una calidad máxima.
No cabe duda de que en Bodega del Abad apostamos por nuestra tierra, El Bierzo. Lo hacemos con nuestras parcelas de viñedos, todas ellas plantadas en la comarca berciana; con nuestros vinos, pertenecientes a la D.O. Bierzo, y, por supuesto, con las uvas con las que las elaboramos. Y es que todas nuestras referencias son monovarietales elaboradas únicamente con las uvas autóctonas de El Bierzo: la blanca godello y la tinta mencía.
Hace unas semanas os hablábamos en nuestro blog de la vídeocata de Abad Dom Bueno Godello Esencia que el enólogo de Bodega del Abad, Ramiro Carbajo, llevaba a cabo en nuestra finca Los Almendros.
En Bodega del Abad iniciamos nuestro camino en el mundo de los vinos de calidad en la añada del 2000. Al poco tiempo ya habíamos logrado entrar con nuestros vinos en un mercado en el que la variedad mencía ya estaba presente. Sabíamos que contábamos con un cepaje diferente que se alejaba del mundo sensorial de la variedad tempranillo, que entonces acaparaba la atención de los consumidores debido a la enorme presencia y a la diversificación de esta cepa en el Duero y en otras comarcas vitivinícolas españolas.